Efecto de la dureza del pellet en la mortalidad del nematodo entomopatógeno Steinernema glaseri encapsulado mecánicamente

Abstract

La aplicación de plaguicidas químicos ha provocado daños al medio ambiente y a los seres vivos, haciendo necesario el desarrollo de bioproductos con agentes de control biológico efectivos que contrarresten dichos efectos. En el CIIDIR Oaxaca se han formulado, manual y mecánicamente, bioplaguicidas en gránulos (pellets) con nematodos entomopatógenos de la especie Steinernema glaseri; el tiempo de supervivencia de los nematodos para los primeros fue de 4 días (Girón, 2008), en tanto que los segundos tuvieron peso y esfericidad uniformes al 90 % (Matadamas, 2010), por lo que el objetivo del presente fue investigar cuál es el efecto de las operaciones mecánicas de pelletizado y la dureza del pellet en el tiempo de supervivencia. Los nematodos S. glaseri fueron encapsulados en tierra diatomea y atapulguita en diferentes proporciones. El método mecánico de pelletización fue el propuesto por Espinosa (2005), almacenando los pellets a temperatura ambiente de 17-29 °C. La prueba de dureza se realizó bajo la norma ASAE 363.3 y el conteo de los nematodos sobrevivientes se realizó a diario con el método de Chen y Glazer (2005). Los datos fueron procesados por ANVA y comparación de medias por la prueba de Tukey al 0.05. Los resultados muestran que el proceso de encapsulamiento mecánico duplica el tiempo de supervivencia de los nematodos reportado para los elaborados manualmente. La supervivencia de los nematodos en los 3 primeros días es del 100%, la cual va disminuyendo gradualmente. Los mejores resultados se obtuvieron con los pellets elaborados con tierra diatomea (Celite 209) y mucílago de nopal, registrando mortalidad de 22 % al día 8. Las pruebas estadísticas muestran un coeficiente de correlación igual a 0.030 lo que comprueba que no existe efecto de la dureza en la supervivencia de nematodos, si bien esta variable no resultó determinante, se calculó el rango de dureza con los que se obtuvieron los mejores resultados de supervivencia que son entre 82.51 y 121.25 g/mm2. Se concluye que el proceso mecánico utilizado y la dureza de los pellets obtenidos son adecuados para la producción masiva de este tipo de bioplaguicida.